En mi check list de lugares por conocer, se encontraba la fría ciudad de Londres. Caminar por sus calles y deleitarme con su imponente y hermosa arquitectura era algo que quería vivir, y principalmente, volver a sentir el frío hasta el interior de cada hueso de mi cuerpo mientras que el vaho de mi respiración se lo llevara el gélido viento.

Primera parada
Llegamos desde Madrid hasta el aeropuerto Stansted de la ciudad de Londres por la aerolínea Ryanair, los vuelos pueden salir desde €10. Este fue nuestro puntapié para organizar el viaje a Europa. El camión del aeropuerto a la ciudad de Londres tiene un valor de £10 libras que equivales a unos $14 dólares americanos.
Moverte por la ciudad es bastante simple por el sistema de metro y buses que unen los puntos más importantes de la ciudad. Nosotras adquirimos la Oyster la cual te da un valor más bajo en cada pasaje, el costo de esta tarjeta es de £7 ($9 dls).
Antes de continuar, esta visita a Londres la hicimos con bajo presupuesto así que visitamos los puntos que tenían entrada liberada.
Tower Bridge
El Puente de la Torre como se le conoce en español, es uno de los iconos de la ciudad, le cual cruza el Río Támesis. Su inauguración fue en junio de 1894 por el Príncipe de Gales, su construcción se demoró 8 años. El estilo arquitectónico de este imponente puente es victoriano neoclásico, construido por Horace Jones. Simplemente no dejes de visitarlo.

Palacio de Buckingham
Clásico de los clásicos, si vas a Londres es conocer el Palacio de Buckingham. Nos recomendaron visitarlo a la hora de cambio de guardia pero nos topamos con un evento protocolar y fue un viaje al pasado, con carruajes y gente con sombreros raros.
La construcción del palacio se inició en 1709 y finalizó en 1829. Aquí vive la reina de Inglaterra, La Reina Isabel, que por cierto, en esta ocasión no pudimos saludarla, así que se las debemos.
Después de visitar el palacio, puedes caminar por los bellísimos parques de su alrededor, tiene una extensa laguna donde podrás ver distintas especies de aves como pelicanos rosados.
Museo Británico
Cuando entré a este lugar entendí dónde estaba la mayor parte de los tesoros del mundo. Aquí podrás viajar por piezas originales de Egipto, Grecia y hasta la Isla de Pascua. Es bastante impactante visitar cada salón. Por ejemplo, posee el 60% de las piezas de Grecia, más que el mismo país. La noticia que para no sentirse tan mal, la entrada es gratuita.
Trafalgar Square
Llegamos a este lugar porque nos equivocamos de bus, algo usual cuando viajas. Esta plaza guardaba una gran historia. Se construyó para conmemorar la batalla de Trafalgar (21 de octubre de 1805) en que los británicos vencieron a la armada francesa y española frente al cabo de Trafalgar en los Caños de Meca.
Nos tocó presenciar algunas protestas, skaters y algunas personas mirando al horizonte viendo pasar el tiempo en esa fría tarde. Un lugar donde puedes ver un poco de la cotidianidad de los ingleses.
Picadilly Circus y Chinatown
Picadilly Circus es el Times Square europeo. Aquí se encuentran bares, tiendas, teatros, luces y glamour. Un lugar de encuentro de los locales y turistas es una fuente con un ángel llamada el Ángel de la Ciudad de la caridad Cristiana realizada por Alfred Gilbert para conmemorar los trabajos filantrópicos de Lord Shaftesfury.

Caminando nos topamos con una hermosa entrada a Chinatown y se nos ocurrió la maravillosa idea de comer por ahí pensando ilusamente que sería mas barato, la cosa que lo más barato que encontramos fue una sopa que nos costo £10, fue la sopa más cara que he comido en mi vida, lo bueno que estaba deliciosa.
Estación de Trenes de Harry Potter
Visité la estación de King’s Cross para regalarle la foto a mi amiga Gaby Potter que es fan de esta saga inglesa. Aquí existe una tienda de merchandising de Harry Potter y te puedes sacar una foto con el carrito estrellado en la pared en la plataforma 9 3/4.

Big Ben
Para cerrar mi viaje en la ciudad de Londres, no podía faltar el rey de reyes, el gran Big Ben. Obviamente cuando llegué, la lagrima comenzó a brotar desde mi ojo congelado. Es una belleza arquitectónica impresionante y cuando vas avanzando por el puente de Westminster y lo ves en su máxima expresión, es una explosión de perfección. En el mismo puente hay un señor tocando la gaita y de fondo se ve el London Eye.

El estilo arquitectónico del Big Ben es neogótico y fue diseñado y construido por Charles Barry y Augustus Pugin entre 1843 al 1859.
Este viaje me enseñó que Londres es uno de los países más caros que he visitado, pero es un destino que no debes dejar pasar, es una ciudad bellísima que simplemente encanta.
y para terminar… Would you like a cup of tea? (leerse con acento británico)